sábado, 14 de septiembre de 2013

Si no matas, te matan, y si no te matan, puedes matar y sentirte muy bien


  "El 70% de mis hombres están muertos, heridos, locos o atontados."
  General Fritz Bayerlein, jefe de la Panzer Lehr, durante la batalla de Normandía, 1944

Todo comenzó con Caín cuando éste mató a Abel
el pecado original por antonomasia
porque si somos hijos e hijas de Dios
todo está mezclado y no hay cabos sueltos
entonces este proceso tan engorroso y pútrido de gases malolientes y óxidos corrosivos
no ha cesado y seguimos matándonos unos a otros
no atinamos a ver que a menos que paremos este círculo vicioso por entrematarnos
o jodernos como niños torcidos y encaprichados con juguetes diabólicos
jamás veremos dos días seguidos sin hechos lamentables y sangrientos o sanguinarios
que enlutan y chocan volviendo nuestros días tan esquizofrénicos
que resulta imposible impedir que los humanos
se sientan disminuidos y aturdidos por actos enormemente deleznables y culposos
que hace tiempo dejaron de ser originales o geniales y se tornaron más bien horrorosos y viciosos.

No entiendo ni acepto este programa y orden de ideas de días tan oscuros como nefastos
este pecado original por antonomasia
que vuelve a familiares y extraños tan enguerrillados unos con otros
no comprendo porqué no se han hallado métodos generosos y bondadosos
como conciertos rusos y norteamericanos para pianos no tan rudos
que le pongan un parao' a emociones y sentimientos tan horrendos y oprobiosos
como eso de tener que matar o destruir para vivir cómodos
y tener que irnos por caminos tan poco solventados
por no encontrar un aliciente o alucinante que nos vuelva más completos y menos energúmenos
más abiertos a vientos y tornados menos traicioneros
¿por qué caray no piensan nuestros capitanes de industrias y jefes de mataderos
que por algo no podemos transformarnos
dejar atrás la pobreza y los atrasos
la desdicha y la desigualdad que nos quieren encasquetar los malandros por turnos
que gobiernan y nos deshacen como galletas de mal sabor y gustos no tan buenos
inclinándonos a vivir en ranchos y casas muy mal acomodadas con patios sucios
que no se barren ni se desinfectan como debe ser cuando llueve a cántaros?
y si es así habrá que apelar a Martha Argerich para que nos desinfecte los pianos fallidos.

Mi corazón se acongoja y se achica como un acordeón quebrado en pedacitos
no logro incluirme en esta sociedad tan mal aventada e incierta hace milenios
por no poder encontrar las armas letales y meterlas bajo tierra en basureros putrefactos
o volverlas añicos para que llegue el Gran Entendimiento que librará del Hedor a los humanos
tornándolos más buenos y sabios como ramilletes de narcisos
endulzando más sus mentes y oxigenando más sus coyuntaras y músculos
para un nuevo aire con olor a francoincienso y nardo por antonomasia
aclarándolos y haciéndolos más mansos y visionarios.
Si esto sucediere no tendré que desaparecer y tomar nuevos cuerpos deshilachados
o nuevos cursos que me saquen de estos pobres pianos sin ríos caudalosos y majestuosos océanos
pues surgirán mejores y más deslumbrantes virtuosos
que mezclen e interpreten con fuerza y taquitac lo que cayó en ellos
sin necesidad de llevarlos hasta la Cruz Roja para inmunizarlos y desinfectarlos
porque al fin muchos humanos entendieron que vale la pena vivir y no quedar vueltos añicos
por la mala voluntad de miles de millones de subhumanos desesperados y destruidos
por no entender lo que significa salir del seno de Dios y ser besado y bailao' por ese mismo Dios.

Caracas, 14 de septiembre de 2013
 
¡Qué mantequilla, a bordo del Atlas 37-9 el Nefilim Cabezón de Barranquilla aterriza en Tasmania! Obra del Autor. Caracas. 2013.