lunes, 28 de noviembre de 2016

El Mesías 10 (por venir) no es Humano. Es Energía, Gas, Matiz y Plasma. Arseniuro de galio.


Sol Central de mi Profecía sobre el Mesias 10 (por venir). El GaAs. Obra del Autor. Caracas. 2016.

Lo creé y plasmé en diferentes escritos y pinturas filosóficas: el Mesías 10 NO es Humano. Es Energía, Gas, Matiz y Plasma, un Portento, Prodigio y Maravilla de la Naturaleza que está por llegar. No es un ente de carne y hueso, es incorpóreo, metacósmico, inmortal, un producto del Aire Cósmico, una sutil emanación de la Noósfera, el agregado de varios Cristos Cósmicos, se adentrará en la ionósfera, biósfera y atmósfera de la Tierra la cual refrescará. Pero como es una materialización del espacio intersideral terrícolas querrán apropiarse de ella y dominar su proyección para manipular y esclavizar: ¡crasa soberbia, ilusión, engaño y mentira! El Mesías 10 es un Agente Libre de la Mutación y arribará a nuestro orbe inestable, inseguro, imprevisible y belicoso. Como no es de nadie en particular, hecho de los sagrados caracteres de la Tabla Periódica de los Elementos, entidades humanas sin escrúpulos querrán ser su canal y portavoz. Nadie podrá serlo por encima de los demás: no es posible adueñarse de la Energía Pura del Universo, menos aún si los Grandes Arquitectos del Saber, del Amor y el Dominio, que moran en la Décima Dimensión, precipitarán un Rocío muy selecto sobre Gaia para que el planeta se nutra de una rara exquisitez o delicia y adquiera un primor que le viene, según dharmas y kharmas dejados por seres muy evolucionados nacidos en él o importados de muy distintas esferas de luz, de visita de vez en cuando, y se sume e inserte en el Panteón de Planetas, Sistemas Solares, Cúmulos y Galaxias de alianzas de la Intergaláctica Confederación Alpha DK. Por consiguiente, bien recibidas serán las personas, criaturas y elementos, que puedan absorber las ondas y frecuencias mesiánicas que en un futuro próximo se van a  depositar en la superficie y en el subsuelo para que nuestro planeta evolucione, entre de frente a la floral Edad del Espíritu Santo. Este gran “trueno” ha sido aguardado desde el Cretáceo de la Era del Mesozoico cuando llegaron los primeros exploradores a la primitiva Oceanía. De acá, antes, fue de donde implosionó, desgarróse, un gran cuajo, una colosal cantera de roca volcánica: nuestra alma gemela, la Luna. Nuestra existencia se la debemos al elemento Agua por hacer de Gaia una hermosa, fértil, variada, cambiante rareza; nuestra sangre, tan rica como biodiversa; nuestras necesidades, urgentes y apremiantes. Pues bien, regresando al tema principal de esta profecía, el magnífico Mesías 10, anunciado en distinguidos Libros Sagrados, será un puente largo, elevado, de luz, unión, fe y alegría, para que ninguna raza, etnia, género, nación, segmento, baile, se crea superior, con más derechos que otras especies y pieles. No obstante, habrán sendas modificaciones; por lo tanto, es bueno decirlo de una vez: Gregorio Samsa dejará de ser un bicho o monstruo repelente, alienado, vituperado por los demás, ya que lo horrible, lo torcido, lo malsano, lo endemoniado, lo terrorífico, lo insoportable y lo demencial dejarán de presentarse y los úteros sólo darán a luz a criaturas lindas, agradables, cariñosas e inofensivas. O semidiosas. Defectos, taras, males, plagas, virus, serán paulatina y plenamente eliminados; vendrán raíces, granos, aceites, maderas, invenciones y remedios potentísimos de varios áshrams cósmicos; pero la  medicina más curativa será la que producirán los nuevos seres que nacerán acá con 7 virtudes, ÂKS de oro y un coeficiente muy alto de inteligencia mecánica y cuántica. Este desarrollo incentivará que plantas, metales, minerales, animales, fenómenos y elementales refinen sus sentimientos y herramientas psíquicas y espirituales. La Tierra experimentará un resurgimiento monoatómico nunca visto antes. Ingresará a una dimensión superior. La Alta Jerarquía lo sabe. Su meta elevada, diversificada, dulce y honorable, se basa en el servicio, el altruismo, la sapiencia, eficacia y eficiencia, la ciencia del bienestar, el bien común y las artes. AUM.

Andrés Ansolrâ Boulton Figueira de Mello  

Caracas, 26-28 de noviembre de 2016

miércoles, 23 de noviembre de 2016

¡Seguimos pensando y defendiendo ideas extremistas y excesos de todo tipo!


El pesadísimo bulto del decrépito Saturno en mi horóscopo natal me hizo ver que el extremista de Plutón o Hades también puede tumbar y hasta llevar a la postración y la muerte en casos extremos y por lo tanto el agravado de Saturno es menos malo que el excesivo de Plutón. He aquí unos pensamientos que le suministré a una interlocutora en mi blog que sirven para poner en claro lo que pienso acerca del exceso (por ejemplo, un exceso de alimentos provoca obesidad, como señala el diccionario multilingüe que Apple, a la que le he sido muy fiel, me colocó de gratis en mi ordenador MacBook Pro 17”, que ya no se fabrica más, lo cual considero un error):

1. Demasiado calor te derrite, tuesta el cerebro y pone tonta o tonto.
2. Demasiado frío te paraliza, congela el cerebro y pone lívida o lívido, si no mata.
3. Demasiada derecha o extrema derecha te fanatiza, demasiada izquierda o extrema izquierda te fanatiza.
4. Demasiado alto no puedes ver hormigas y microbios, demasiado pequeño no puedes recoger mangos de un árbol.
5. Demasiado brava no ríes, demasiado serio no ríes.
6. Demasiado criticona no tienes sentido de humor, demasiada callada no hablas y expresas.
7. Demasiado vino te emborrachas, demasiado abstemio no disfrutas ni juegas.
8. Demasiado, ¡qué vaina, me pierdo del sol que está en el centro del sistema solar, me da calor y vida, amén de luz!
9. Demasiado es tan excesivo y extremista que no veo los detalles y no me puedo equivocar o arrepentir porque creo que siempre tengo la razón, siempre soy arrogante, no puedo remendar mis excesos y me creo infalible.
10. Hablo demasiado y no dejo hablar a los demás, hablo demasiado poco y parezco mudo y los demás me comen con sus palabras.
11. Demasiado es demasiado y por lo tanto quiero seguir en el ruedo y salir cuando me da la gana. Soy flexible.
12. Me contradigo porque sé que cada palabra, cada pensamiento, tiene su doble y por lo tanto a veces erro y pido disculpas porque me pasé de largo o de ancho y debería más bien buscar el centro que me conduce a tu corazón y al centro de tu inteligencia. Porque si me voy por las ramas no llego al tronco o a las raíces. Guindo y me caigo. ¡Paf!
13. ¡Mira que hasta Donald Trump se ha echado para atrás, qué bueno! ¡Imagina si Hitler y Stalin no se hubieran excedido en sus diatribas, delirios y absurdas ideas! ¡Insanos y peligrosos idiotas en esencia!
14. ¡Piénsalo, no es descabellado tratar de que nuestro coche no se estrelle porque nos excedimos en la velocidad! ¡Llegaremos a la playa y la montaña que disfrutaremos!

No hard feelings. Cool, woman! No crazy limits!

Así que, como he dicho en repetidas ocasiones, mi vía es la vía del medio, del centro, del núcleo, pues si voy a extremos me desequilibro, pierdo la perspectiva, el zoom, el horizonte, mi centro de gravedad, no distingo sino unas pocas luces enfrente y alrededor, me vuelvo avaro, codicioso, desdoro, miope, excesivamente subjetivo, o megalómano, tirano, obcecado, misántropo y misógino, por creer que lo que está frente a mis narices es lo único que hay, lo que veo chiquito es gigante o es gigantesca la letra minúscula, etc. ¡Quiero comandar mi nave y no zozobrar como un pendejo o iluso que por perder la cabeza se jodió y se fue a pique!  

Caracas, 23 de noviembre de 2016

viernes, 11 de noviembre de 2016

Los excesos son muy negativos y peligrosos. Nos encierran en un círculo vicioso y pueden matarnos sin piedad. Debemos manejarlos con lucidez y temple



Ha llegado, vía Elecciones libres, a la próxima Presidencia de los EE.UU., la nación más rica, poderosa, influyente y mixta del mundo, el señor Donald Trump, un hombre y líder nato, afortunado, raro, inteligente, listo, controversial, impredecible o uraniano, excesivo, apasionado, marcial, abrasivo, violento y revolucionario. Su victoria, tan inesperada como insólita, le dio al partido Republicano el control total del Congreso. ¡Cuánto más habrá! Hace seis meses aproximadamente predije que podría llegar a ser Presidente pero después de hacer su horóscopo lo engaveté, puse de lado, y unas semanas antes de ser declarado vencedor en unas muy reñidas campañas electorales cambié de opinión por su manera de ser ante las cámaras y me decanté por Hillary Clinton, que tampoco es muy santa que digamos y no me convencía del todo. Después de los resultados electorales volví a encontrar mi vieja predicción y vi porqué su destino, hado y sino, me habían llamado la atención hace muchos años. En líneas generales, me impresionan los seres que se destacan del montón y dejan una buena huella. Eso hace un sol humano y más todavía uno inmortal.

En los albores de la década de los '70 del siglo XX me fijé en Donald Trump y quería conocerlo personalmente. No sé si podrá ser. Ahora bien lo que interesa en este trabajo es que él, como la mayoría de las personas que llegan a ser poderosas en cualquier esfera, deben tratar de no excederse porque a mi entender cualquier exceso (o arrollamiento, como en el ámbito político, económico, financiero, religioso, deportivo o cultural) es peligrosísimo, hasta cansón, fastidioso, patológico, y termina convirtiéndonos en esclavos, sometidos, arrinconados, jamás en seres libres, creativos y productores, porque el exceso no admite rivales, debilidades y complacencias. Es egotista, egomaníaco o egocéntrico y despectivo, y Trump tiene a Leo en el Ascendente sideral en conjunción con la eclíptica estrella Régulo. En este caso en particular, Algol en el Medio Cielo natal y Marte en el ASC natal, cuadrando el MC y el AMC, dan un pronóstico reservado, incierto, inseguro. Además, Ketu, el Nodo Sur del Dragón, se junta con una Luna en Escorpio, marciana, violenta, luchadora. Entonces,¡ojo!

Tanto el poder como la riqueza, si se torna en una obsesión desmesurada y falta de escrúpulos, o sea, en una fijación tiránica, conlleva a la aniquilación o muerte, sea física, espiritual, mental, psíquica, porque quien se excede se estrella, choca, implosiona o explota, pierde el control, pues va a exceso de velocidad y no frenó a tiempo. Mientras podamos dominar nuestros instintos, sentimientos, emociones o humores podremos sortear los extremos porque, como extremos y contrarios que son, tienen la posibilidad de tumbar el curso y destino de nuestra barca, nave, automóvil o carrera profesional. Si perdemos la cabeza, no sabemos cuándo pararnos y tomar una bocanada de aire, sacar la cabeza del agua, quedarnos quietecitos. Estamos fritos. Por consiguiente, le deseo al señor Trump el mejor de los aciertos porque nuestro mundo es mucho menos seguro de lo que él se imagina. Tanto él como los demás líderes del mundo a menudo se creen irreemplazables, eternos, intocables, fijos, sellados para siempre con sus ideologías, creencias, doctrinas, estados y religiones personales a la cruz que escogieron por una razón u otra en un momento dado. Siempre debemos actuar con inteligencia y prudencia, estar alerta, y en este caso Trump no es ni estúpido ni lerdo, aunque a menudo actúe con brutalidad, sin tino, tacto y cordura. Por consiguiente, ahora que será Presidente, tiene una enorme carga sobre sus hombros, como el titán Atlas, medir muy bien sus palabras y ademanes y limar asperezas por el bien de millones de seres en este mundo. Dios le ha dado otra oportunidad de redimirse. Trump debería ponerle atención a la canción Miracle of Love de Eurythmics. ¡Cambia papá!

El camino ideal es el camino del medio, el del centro del círculo, el del centro de gravedad, el núcleo celular y el del número 1 no arbitrario ni ciego. Allí es donde está la fuerza, el poder verdadero, hacia donde y de donde proceden los anillos concéntricos, radiales, solares. Allí está la madre de todas las revoluciones y órbitas. El líder que no se da cuenta de ello termina mal y de paso pone a sufrir al pueblo, las masas, la Humanidad, los débiles y miserables que no son pocos. Ojalá sepan esto quienes mandan en este mundo porque han habido muchos tiranos, dictadores, demagogos y autócratas en la Historia. Hay que ver y oir mucho, pensar antes de hablar, dominarse, autoconocerse y, si hay que hacer énfasis en un momento dado, hacerlo con lucidez, sapiencia, sabiduría y amor, ya que la vía política es complicada de por sí. El líder es una luz, una estrella, en principio, y hay que asumir la fulgencia con altura, distancia relativa y categoría, porque si no será terrible lo que sobrevendrá y así como se sube se cae también y puede ser repentina y violentamente. Caer es un accidente y la Ley de Accidentes es para todo el mundo., como le sucedió a Phaetón cuando quemó sus alas.

Nadie escapa al error, nada es completamente recto hasta el final, saber o percibir que la corriente eléctrica, el río, el magnetismo terrestre, las fallas sísmicas, etc, siguen un curso ondulante, sinuoso, elástico, cambiante, oscilante, que la Madre Naturaleza debe ser nuestra guía pues Dios la construyó y formó así eones, edades atrás, es bueno y útil amén de inteligente, y por eso yo le recomiendo a Donald Trump leerse a Confucio y Lao Tsé, no meterse y atacar sin reflexionar a China, pues reencarnó allá más de una vez, se crió también al lado de Atila, jefe de los hunos, y no olvidarse de ayudar a Venezuela a salir de su masivo hueco negro. Llegar a lo alto es importante pero siempre habrá un alto más que alcanzar, una cordillera más que escalar, el viaje no termina nunca. Entonces, lo mejor es reir, sonreir, bailar de vez en cuando, darle la mano a los niños y las niñas, acordarse de los demás y de lo que nos circunda, sean animales o piedras y plantas, excusarse también, así como se va al excusado a descargar excrementos y orines. El sendero de la moderación y del placer y el gozo no son opuestos extremos, eso mismo nos enseña Dios de mil y una formas, seguirá haciéndolo vez tras vez cuando nos indica que tras un domingo feriado y primer día de la semana, según la tradición esotérica milenaria, viene el lunes, que filtra y hace un recuento más apegado y familiar de nuestras circunstancias diarias y cotidianas. Mandar es importante pero más importante es mandarse a sí mismo y dar buenos ejemplos. Si no, el mando conlleva a la locura y el desastre, quizás al juicio y la mazmorra. ¡Ojo, pues!

Caracas, 11 de noviembre de 2016